Dandelion - Wishes brought to you -Jisoo El guardian de los secretos

Jisoo, el guardián de los secretos


- Nombre: Jisoo Rahasia
- Edad: 100 años justos
- Ocupación: Príncipe Rahasia


- Descripción Psicológica - Personalidad: 
Si algo define a Jisoo es su curiosidad. No puede soportar oír susurros sin acercarse a espiar pero como buen descendiente directo de Gato, secreto que escucha, secreto que se lleva a la tumba porque entonces dejaría de ser un secreto, aunque no todo el mundo conoce ese hermetismos Bastet y su curiosidad puede meterlo en problemas más de una vez.

Es elegante, es sensual, es travieso e independiente, no le gusta que le digan lo que tiene que hacer y normalmente si alguien lo hace acaba haciendo lo contrario solo por fastidiar, aun cuando se muera por hacer lo que le dicen. Por eso con él hay que tener mucho tiento con las palabras que se dicen o usar mucho de psicología inversa.

Aunque los Bagheeras son seres tranquilos y pacientes, bastantes tolerantes con el resto de las razas, Jisoo tiene un punto salvaje y rudo a veces, aunque suele ir ligado al celo, algo que realmente no controlan y los incitan a dejarse llevar por los impulsos como les pasa con la curiosidad.

Tiene muchos malos hábitos felinos, bueno, malos hábitos en la sociedad humana porque en su tribu son de lo más normal: No soportan que lo mojen de golpe y sopetón, tiene tendencia a afilarse las uñas en muebles y zapatillas, cuando está a gusto abre y cierra las manos y ronronea, no soporta estar sucio, pierde la concentración ante cosas peluditas que se mueven…

Suele ser autoritario y mandón, pues es un príncipe, le agrada que la gente haga lo que dice, eso lo vuelve mimoso, aunque se pone tenso si alguien le acaricia las orejas pues son muy sensibles al igual que la zona de unión entre la piel y la cola. No lo hagas si no quieres verte con el culo en pompa.

A veces puede parecer muy infantil, pero solo porque es un felino y no pueden evitar ser caprichosos. Si se enfada buscara un lugar alto e innaccesible donde ignorarte por siempre jamás… o hasta que se le pase, misma zona que buscará si ha hecho algo “malo”.

Puede llegar a ser tan silencioso y bajar tanto su perfil que parece que se vuelve invisible cuando está en una estancia, de ahí que sus dotes como espía sean excelentes, aunque poco útiles pues no comparte la información que recoge. Los Bastes son como almacenes de datos. Nunca revelaran lo que saben pero si esto es de vital importancia para alguien podrían ponerlos en la línea correcta mediante pistas y acertijos.

Es misterioso, le gusta dejar frases a medias o guardarse información irrelevante para hacerse el interesante, no es en absoluto claro y directo, y dará mil vueltas antes de que sepas que problema tiene contigo o que es lo que quiere.

Aunque se dice que los felinos son bastantes promiscuos, los Bagheera de la tribu de Jisoo tienen una particularidad en dicho campo y es que cuando eligen una hembra, tienen que permanecer con ella hasta dejarla preñada y poder robar la cría, que inevitablemente será un Bagheera. Una mala elección podría hacer que un Bastet no pudiera regresar a su tribu pues se sentirá encadenado a su elección hasta obtener un vástago, momento en el cual el cambiaformas pierde total interés por su elección, aun si hasta el momento creía sentir un profundo amor por ella.

Son muy temperamentales, lo que los lleva a veces a cambiar de forma accidentalmente.

- Descripción Física:
Cómo homínido es un hombre alto, de más de metro noventa, de complexión fuerte pero elegante en formas, pues su musculatura es marcada pero no hinchada, con una espalda ancha. Sus rasgos son masculinos y varoniles, de hombre joven de veintitantos, conservando su mirada felina de ojos ambarinos y unos colmillos más desarrollados de lo normal, muy finos. Tiene dificultad para ocultar las orejas, así que usará gorros como norma para ocultarlas si tiene que caminar entre humanos. Aunque si se esfuerza un poco puede llegar a ocultarlas por completo (pero en ponerse un poco nervioso o sobresaltarse saldrán solas sin remedio). Su forma preferida es con las orejas, la cola y las garras solo, no llega a tomar forma de Sokro, pero por alguna razón se siente más cómodo así, ya que mantenerlas ocultas adoptando una total forma homínida le provoca mucho estrés. Prefiere esa forma híbrida o la de felino, siendo una pantera negra propiamente dicha pero de un tamaño pequeño, no más grande que un pastor alemán. 
Sus cabellos son oscuros, espesos, salvajes y desordenados, algo largos pero sin alcanzar los hombros.
Siempre lleva un colgante que lo identifica como el príncipe de su tribu.

- Historia de tu personaje: 

La Leyenda dice que los hijos de Dragón fueron cargados con la responsabilidad de recordar todo lo ocurrido para que las generaciones futuras pudiesen usar esa sabiduría. A los hijos de Lobo se les encargo proteger a Gaia de todo mal. Gaia creyó que bastaría con estos dos, pero pronto empezó a oír quejas. Gaia prometió encontrarles un aliado inteligente que pudiese espiar los acontecimientos en tierras lejanas y reunir información sobre sus enemigos.

Encargó a los hijos de Gato ser sus ojos en el mundo y espiar los secretos que sus otros hijos necesitaban conocer.

Lobo y Dragón no tardaron en comparecer con la misma queja. “Nos prometiste un aliado”, dijeron. “Y os he dado uno”, contestó Gaia, llamando a Gato ante ella. “Sé que tus hijos no han fallado en su tarea, así que ¿por qué no han compartido lo que saben con los hijos de Lobo y Dragón?”.  Gato, que sólo había cumplido a regañadientes con su encargo, pensó en cómo volver esta reluctancia a favor suyo.

“Su trabajo no está completo. Los lugares del hombre contienen muchos secretos, pero pocos escondites para mis hijos. Los hombres huyen asustados cuando mis hijos se acercan mucho, así que no pueden descubrir sus secretos. No quieren dar un informe incompleto, pues podría ser tan inútil como no dar nada.”

“Muy bien”, dijo Gaia. “Ahora podéis asumir la forma del hombre para descubrir sus secretos”

Gato se alegró. Sus hijos partieron para descubrir los secretos del hombre, y así fue como nacieron los Bastet.

Cuando Dragón y Lobo comparecieron de nuevo ante Gaia gruñeron que Gato seguía sin revelarles lo descubierto. Gaia volvió a llamar a Gato y le preguntó por qué no había compartido sus secretos. Gato contestó: “Es imposible compartir un secreto, pues cuando lo haces deja de serlo”. Gaia vio entonces que no conseguiría nada de Gato y se enfureció por haber sido manipulada. “¡Muy bien! Puedes guardarte tus secretos… pero guárdalos bien, porque serán tu ruina!”.

Jisoo había escuchado ese cuento de los ancianos innumerables veces, pues era narrado en Luna Llena a cada nueva camada de su tribu, y él siendo el Príncipe de ésta debía dejar la marca de los Bagheera en cada frente de los pequeños niños para despertar su sangre Bastet y que pudieran transformarse en felino, siempre machos, pues al parecer su tribu tenía esa curiosa peculiaridad. Desde tiempos que se habían perdido en la Umbra incluso para ellos, ninguna hembra había salido de la semilla de un Rahasia.

Cuando movido por la curiosidad había preguntado a los ancianos, estos entre risas propias del que no tiene la respuesta y enigmáticas miradas propias de la especie, le respondían que seguramente Selene les había otorgado aquella maldición para impedir que se acomodaran en su seguro Reino Cubil, y obligarles a cumplir los mandatos de Gaia aunque fuera de forma presencial. De ahí que en cada celo, los Rahasia tuvieran que abandonar el poblado en las copas de los árboles, para seducir y preñar mujeres en la ciudad cercana, huyendo posteriormente con los cachorros que engendraban.

Esta práctica solía ser peligrosa, pues el instinto era insalvable y los Rahasia se veían obligados a obedecerlo, no teniendo tanta probabilidad de éxito como se podría presuponer, pues no todas las hembras eran compatibles con la semilla Bastet y un Rahasia que no engendraba vástago no podía regresar al poblado.

De ahí que a la sangre real no se le permitiera caer en el celo de forma natural. Los Rahasia iniciados en la magia y la Sanación habían desarrollado una forma de retrasar este impulso en la sangre real, siendo el shamán del poblado el encargado de buscar una hembra compatible que pudiera dar un heredero al trono, pues la sangre de Jisoo, y de su padre antes que él, descendía directamente de Gato y no podían permitirse que se perdiera, pues los Bastet eran escasos y el mismo poblado había padecido ya dos fuertes mermas de población.

Por ese motivo, Jisoo a pesar de haber alcanzado ya la edad adulta, sigue siendo Príncipe. Su padre no puede abdicar en él a pesar de estar mayor y cansado, pues hasta que no haya un heredero, un Rey no puede descansar, pero pronto eso cambiara pues los hechizos de inhibición del celo son cada vez menos efectivos, por lo que la búsqueda de una hembra compatible está en sus últimos momentos, siendo que ya el poblado se prepara la fiesta de coronación.

Jisoo llegará a Crisom en contra de su voluntad, cuando cierto Cazador destruya las esperanzas de su pueblo.

- Habilidades:
*Los Bastet poseen 5 formas: 
Homínido (permite absorber el daño de la plata y permite hablar en Bastet),

Sokto (Más musculosa y ágil que la forma Glabro, con pequeños afilados incisivos, suave y leve pelaje y bigotes vestijiales),

Crinos (provoca un Delirio reducido y permite hablar tanto con lengua felina como el idioma de los Bastet,  se puede pronunciar alguna palabra en lengua humana)


Chatro (esta primordial forma de guerra combina la moderna forma felina con la del smilodon, provoca el Delirio en todo su apogeo y posee la característica marca de 2 colmillos como cuchillas de su antecesor)

Felino (igual de mundana que la forma homínida, salvo por ser más fuerte y ágil y poseer mejores sentidos). 
En todas las formas salvo la Homínida, gozan de un extraordinario sentido de la percepción, pudiendo ver en la oscuridad casi total.

*Reino Cubil
Permite dedicar el territorio del bastet. Este se beneficia en que: puede cruzar la celosía y escrutar en/o desde la Umbra. Dificulta el paso a ésta a los intrusos. Siente todo lo que ocurre en él. Una vez en la penumbra de tu reino Cubil puedes viajar por la Umbra.



*Tiene capacidad para percibir el mundo espiritual e interaccionar con él, así como para ir y venir entre planos pudiendo arrastrar a alguien con él.

*Se sobreentiende que tienen más fuerza que un hombre común, aunque quizás son un poco más débiles que los Garou compensan la diferencia con agilidad, velocidad y astucia (y por qué no decirlo, con bastante más mala leche).

- Debilidades:
*Un Bagheera duerme profundamente durante la Luna Nueva. Una vez se acuesta nada lo puede despertar hasta el día siguiente.

*Haz un rastro de sal; una pantera lo seguirá de principio a fin sin detenerse.

*Bendecir la presa de con Aabhaya (un gesto de manos que significa protección) forzará al gato a huir hasta que su frenesí cobarde termine.

*Es alérgico a la plata.

*Su curiosidad hace que no pueda resistirse a espiar allá donde oiga susurros.

*El exceso de sal le sube la tensión y de azúcar lo vuelve frenético.

*Tiene una penosa tolerancia al alcohol siendo capaz de ponerse ebrio con una caja de  bombones de licor.

- Gustos:
El atún y el salmón (aunque le gusta el pescado en general esos lo que más)
El pienso seco para gatitos (si son croquetas grandes no las quiere)
La siesta.
Afilarse las uñas con lo primero que pilla.
Descubrir secretos.
Curiosear.
Los lugares altos.
El ruido que hacen los libros al caerse y las cortinas al rasgarse.
Las cosas peluditas que se mueven y las bolas de estambre.
Que le den la razón y le obedezcan.
Que le hagan mimitos cuando tienen ganas de mimitos y lo dejen tranquilo cuando no.
Pasearse desnudo por su cubil.

- Odios:
Los Garou.
Que le digan lo que tiene que hacer.
Mojarse.
Ensuciarse.
Que le tiren del rabo o de las orejas.
Los ruidos estridentes.
Los coches y el humo.
El tabaco (si fumas delante de él, te quitara el cigarro, lo romperá y lo tirará al suelo).
Que lo contradigan.

- Otros datos: 
No se lleva nada bien con los Garou.
Le atraen los vampiros porque son seres llenos de secretos.